SENTIR!

Ojalá fuera capaz de enfrentar la vida con optimismo, con ganas de avanzar sintiendo valentía, entusiasmo y positivismo. Ojalá esa fuerza y energía me iluminará el camino día a día.

He oído que al sembrar se recoge. Muy cierto. Siembra con amor y recogerás amor, siembra con odio, rencor, y obtendrás esa misma cosecha en tus manos.

Adoro sembrar, y no es en el campo donde más satisfacción me conlleva precisamente, no sé cómo hago pero planta u hortaliza acaba palideciendo bajo mis cuidados. Prefiero sembrar en el corazón de la gente y saber querer a los que me rodean, aunque no siempre me siento querida y protegida como me gustaría. Es entonces cuando surgen tormentas, fuertes vientos, largas temporadas de sequía, granizadas y tempestades que hacen peligrar la cosecha. Épocas demasiado habituales, desafortunadamente. Épocas de inseguridad, desconfianza, temor, ansiedad.

En cambio, si la temporada es buena, viene repleta de ilusión, optimismo, ternura, cariño, sonrisas, sueños, relaciones personales agradables, comunicación con el entorno, confianza y seguridad en lo que hago, soy y digo... Si a todo eso le aseguramos, diriamente, un riego de abrazos, risas, besos, conversaciones y momentos de ocio y relax para uno mismo, la cosecha está garantizada!! Ya pueden venir hasta los peores huracanes, seguro que se encuentra una solución. Sólo hay que querer y quererse!!!!

Sonríe y reíran contigo

da amor, transmite alegría

comparate ilusión

y la recompensa es más grande todavía...

sentirás la emoción de ver feliz a los demás!

Qué bonito es vivir con esa sensación:

aferrarse y disfrutar cada segundo, cada paso,

cada anhelo, cada suspiro, cada sueño, cada mirada...

Doy gracias por estar viva HOY y por permitirme sentir HOY.

Mañana... mañana, ojalá,

mañana quizás,

mañana, no lo sé.